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sábado, 28 de noviembre de 2009

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Improvisada Semana Santa en otoño

El recinto ferial Cajasol-Ifeco acogió ayer el inicio del II Salón Cofrade. Desde las 11 de la mañana, las instalaciones del recinto ferial abrieron las puertas a un escaso público que tímidamente se acercaba a admirar todo aquello que genera la Semana Santa y que se podrá ver hasta mañana, domingo.
Esta edición del Salón Cofrade cuenta con la participación de 33 cofradías que expondrán lo más representativo de la Semana Santa de la provincia, 50 empresas y casi 90 expositores, en los que se podrá observar, entre otros, el trabajo in situ de imagineros, orfebres o bordadores.
El presiente de la Diputación de Córdoba, Francisco Pulido, señaló que el objetivo del Salón Cofrade es "la promoción y difusión de los valores artísticos y patrimoniales de la Semana Santa de la provincia de Córdoba", a la vez que sea "un encuentro de artesanos y cofrades". Del mismo modo, valoró positivamente la "dimensión social y económica" de la Semana Santa, que cuenta en Córdoba con alrededor de 500 cofradías y genera unos 42 millones de euros.
Por su parte, la presidenta de Ifeco, María Dolores Jiménez, destacó igualmente el valor social de la Semana Santa de Córdoba, señalando "la importancia socio económica" de esta celebración, indicando que "es uno de los sectores que menos se resiente".
El Ayuntamiento de la ciudad, además de por varios concejales, estuvo representado por el primer teniente alcalde Rafael Blanco, quien señaló "las múltiples posibilidades que tiene la Semana santa", así como la "importancia para el tejido social de la ciudad".
La muestra que ayer quedó inaugurada está formada por dos espacios uno turístico y otro comercial. En el primero distintos municipios muestran lo más destacado de su Semana Santa. En esta zona está integrado el espacio gestionado por la Agrupación de Cofradías cordobesa que este año, según indicó su presidente Juan Villalba, se ha dedicado a la Cruz, mostrando enseres del patrimonio de las cofradías cordobesas donde está presenta el símbolo cristiano.
La otra parte la conforman los talleres de artesanos y empresas dedicadas a la Semana Santa, donde cereros, merchandising cofrade, bordadores, doradores, orfebres o imagineros, muestran sus productos. Algunos de estos repiten tras el éxito de la pasada edición, como es el caso del orfebre José María Navarro; otros se encuentran algo más expectantes por ser la primera vez que exponen, como es el caso del dorador Rafael Barón, los bordadores Mercedes Castro y Francisco Pérez Artes o el orfebre Emilio León.
Paralelamente, se sucedieron una serie de actividades complementarias. Si bien, la primera de ellas consistente en una conferencia del sacerdote Pedro Soldado Barrios, Delegado diocesano de hermandades y cofradías, fue suspendida por falta de aforo, el resto de actividades, con más o menos público, se celebraron con normalidad. Como es el caso de la dedicada a la candeleria y la cera ofrecida por el cofrade Fernando Morillo o la presentación del anuario de las cofradías cordobesas 2008 a cargo del cofrade Francisco Gómez Sanmiguel.
Como novedad este año la muestra presenta un fin social, para ello en la puerta de entrada se vende un nazareno al precio simbólico de un euro, cuyos beneficios irán a parar al banco de alimentos.
(Articulo publicado en el Diario Córdoba 28/11/2009)

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